La existencia de cientos de trabajadores públicos que falsean enfermedades para seguir cobrando su salario sin trabajar, en complicidad con médicos inescrupulosos y autoridades que “miran hacia el lado”, no es una desviación accidental, sino una consecuencia de una estructura en la que la función pública ha sido degradada a simple clientelismo político y un botín de guerra electoral.
Fernando Monsalve Arias. Abogado. Santiago. 02/06/2025. El reciente escándalo en la Municipalidad de San Bernardo, que involucra a 191 funcionarios públicos en la emisión y uso fraudulento de licencias médicas, es una manifestación más de la decadencia de las instituciones del Estado burgués chileno. ¿Cómo explicar que en una comuna históricamente obrera, símbolo de lucha popular y marginación territorial, se consolide un aparato administrativo corrompido hasta el tuétano?.