El pasado marzo, la  presidenta de la Comisión Europea, Ursula von
der Leyen, anunció su plan de rearme para  Europa, un día después de
que el presidente Donald Trump pusiera en pausa la ayuda militar a
Ucrania. Von  der Leyen presentó un fondo de 150.000 millones de euros como parte de un paquete  de propuestas para aumentar masivamente el gasto en defensa.
El
 pasado 25 de marzo, la Comisión Europea seleccionó 47 proyectos de
minería prioritarios para el suministro de materias primas como el
litio, níquel, grafito, cobalto o manganeso. Entre ellos, se encuentra
la mina de Doade, situada en el municipio de Beariz, provincia de
Ourense, aprobada como Proyecto Estratégico para la extracción de litio.
En su texto, la Ley de Materias Primas Críticas
 (CRMA) de la Unión Europea,  aprobada el año pasado, establece un marco
 para la autorización de proyectos  extractivos para el abastecimiento
de materiales “cruciales”  en la transición ecológica y  digital, así
como para la industria de defensa y aeroespacial. La CRMA  establece
varios objetivos para el 2030; entre ellos, reducir al 65% de la compra
 de materias primas a terceros países. 
El plan de rearme y la Ley
  de Materias Primas Críticas tienen el propósito de fortalecer la
“autonomía estratégica” de la UE, ya que buscan  garantizar un
suministro estable de materias primas para reforzar la industria  de
defensa europea y asegurar la producción de tecnología militar avanzada.
El informe Blood on the Green Deal, elaborado por Corporate  Europe Observatory (CEO) y el Observatoire des Multinationales (OdM), revela cómo  los trabajos de lobby han
 influido el proceso legislativo de la CRMA, que se ha  convertido en
una “barra libre” para la  industria de defensa y aeroespacial, en tanto
 que promueve la desregulación  ambiental para facilitar nuevos
proyectos de minería en toda Europa. Ahora, le ha tocado a Galicia.
Un proyecto minero a 500 metros de una zona protegida
“Hace
 dos meses que la empresa presentó el  proyecto en la Consellería, hemos
 solicitado una copia de la documentación a la  Xunta y todavía no hemos
 recibido contestación”, explica Victor Gil, presidente de  la Comunidad
 de Montes de Framia y miembro de la plataforma vecinal SOS Suído Seixo.
 “La única información que tenemos es la que nos  llega a través de  los
 medios”.
El proyecto de lamina de Doade, presentado por Recursos  Minerales de Galicia —filial  del grupo Samca,
 propiedad de la familia de multimillonarios Luengo Sanz— abarcaría  una
 extensión de 13,62 hectáreas, con galerías subterráneas de entre 50 y
300 metros de profundidad. Un negocio que conllevaría una inversión de
120 millones de euros para la extracción de minerales de  litio,
moscovita y feldespatos durante más de 40 años.
El litio es un
metal clave  en la fabricación de baterías para el almacenamiento de
energía, dispositivos electrónicos portátiles y baterías  recargables
para vehículos eléctricos. Una investigación
 de Luis M. Varela, publicada por el Instituto  Español de  Estudios
Estratégicos  (IEEE), destaca el papel clave del litio en tecnologías de
 almacenamiento y en la producción de energía, lo que lo convierte en
un material fundamental en la industria militar.
Recursos
Minerales de  Galicia ya había presentado en 2018 el proyecto de
explotación para la zona  minera, entonces llamado Alberta I, que
incluía los municipios de Forcarei, Lama, Beariz, Avión  y
Cerdedo-Cotobade. La ausencia de un estudio de impacto ambiental motivó
entones informes  negativos del Instituto Geológico Español (IGME) y la Sociedade Galega de Historia Natural,
 que destacaban la  posibilidad de drenaje ácido de las minas y la
presencia de minerales  radiactivos. Además, la Confederación
Hidrográfica del Miño-Sil emitió un informe negativo debido al riesgo de
 afección a las masas  de agua con metales pesados, que derivó en el
cierre del procedimiento en el  2020.
Por todo ello, la plataforma SOS Suído Seixo
 ya ha avisado que recurrirá ante la  Comisión Europea la designación de
 la mina de Doade como Proyecto Estratégico. Afirman que la iniciativa
de concesión minera actual “es esencialmente la  misma del 2018, con un
nombre diferente”. Las comunidades de montes  afectadas han acordado
oponerse al proyecto, aunque temen que se recurra a la  expropiación
forzosa de los terrenos al ser declarados de utilidad pública.
Según un informe
 elaborado por el  Observatorio Ibérico de  la Minería (MINOB),
Ecologistas en Acción y SOS Suído Seixo, el proyecto se  encuentra en
una zona de alto valor ecológico y paisajístico, propuesta para su
inclusión en la Red Natura 2000 desde hace más de una década. El
documento alerta sobre  los riesgos de pérdida  de biodiversidad y
contaminación de aguas, así como la posible presencia de  minerales
radiactivos.
“Las instalaciones en superficie se encuentran a  500
 metros de la Zona Especial de Conservación Serra do Cando”, explica
Joam Evans, de Ecologistas en Acción.  “Además, el proyecto contempla el
 consumo de 25.700 litros de agua por hora, lo  que provocará un
descenso significativo del nivel freático, afectando a las traídas  y
captaciones de agua existentes”.
Desde Ecologistas en Acción
denuncian “el uso de la figura de interés público para acortar plazos,
sortear alegaciones ambientales y poder recurrir a expropiaciones
forzosas”. De  hecho, la Unión Europea ha establecido que los proyectos
de extracción de  materias primas tendrán un plazo máximo de 27 meses
para obtener sus permisos.
Explotaciones sobre una legislación obsoleta
Galicia ocupa la cuarta posición de producción minera de España, con 362 explotaciones activas en todo el territorio. Según la Estadística Minera de 2023, la comunidad alcanzó un valor de producción de 337,08 millones de euros, lo que representa el 9,4% del total estatal.
A comienzos de este año, el  Gobierno gallego de Alfonso Rueda anunció
 la licitación de 51 derechos mineros caducados  para fomentar la
investigación y posible explotación de materiales minerales.  Además, el
 Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MitecoO)
 ha  presentado
 recientemente el Programa Nacional de Exploración Minera  2025-2029,
centrado en la identificación y evaluación de recursos presentes en  más
 de 1.000 balsas y escombreras de proyectos mineros existentes en todo
el país.
Un informe
 presentado por Amigos de la Tierra junto al  Observatorio Ibérico de
la Minería y la Oficina Europea del Medio Ambiente, alerta sobre los
riesgos  sociales y ambientales asociados a los proyectos mineros
declarados estratégicos por la Comisión  Europea. El documento denuncia
la falta de transparencia en el proceso de  selección de estos
proyectos, así como la obsolescencia de la actual Ley de  Minas, que no
garantiza ni la protección del medio ambiente ni la participación
efectiva de las comunidades afectadas. “El lobby minero no quiere que se
 toque  la Ley de Minas, así como tampoco quiere que se toque la Ley de
Expropiación  Forzosa”, afirma Evans.
La empresa promotora del proyecto de la Mina de Doade, Recursos Minerales de Galicia, es miembro de la Cámara Oficial Mineira de Galicia, una entidad de derecho público tutelada por la Xunta que actúa como lobby del sector. Tal y como reveló El Salto, la Xunta ha destinado fondos públicos a campañas de greenwashing impulsadas por esta Cámara, presentando la minería como una actividad “sostenible” y “compatible con el medio ambiente”, mientras apoya la reactivación de derechos mineros caducados y proyectos altamente cuestionados por su impacto ambiental y social.
Fuente: https://www.elsaltodiario.com/galicia/litio-gallego-nuevo-militarismo-europeo