La Protesta de Baraguá, símbolo de la rebeldía nacional cubana en todos los tiempos
Se dice, no sin acierto, que la Revolución Cubana se puso en marcha el 10 de octubre de 1868. En aquella histórica fecha, Carlos Manuel de Céspedes reunió a todos los esclavos en el batey de su finca La Demajagua y les dijo: “Ciudadanos, hasta este momento habéis sido esclavos míos. Desde ahora, sois tan libres como yo. Cuba necesita de todos sus hijos para conquistar su independencia. Los que me quieran seguir que me sigan; los que se quieran quedar que se queden, todos seguirán tan libres como los demás”. Al día siguiente, el ataque frustrado al pueblo de Yara fue el primer hecho armado de la Guerra de Liberación de los Diez años.
Más de nueve años después, errores personales en el campo mambí, así como deficiencias en la concepción y funcionamiento del aparato civil y militar, entre otros importantes factores, propiciaron el regreso de los españoles al control de la contienda, materializándose éste el 10 de febrero de 1878 con la firma del Pacto del Zanjón.
Pero no todo el mambisa..